Escuchar historias de parejas sentimentales que se conocieron por medio de Facebook, Tinder, Match o cualquier otra plataforma de interacción en línea (apps o páginas web) es bastante común por estos tiempos.

Los medios tradicionales por los que las parejas iniciaban una relación como el trabajo, la universidad o los amigos han perdido ventaja ante estas nuevas tecnologías que parecen ofrecer, para algunos, una cantidad más amplia de prospectos, por ejemplo, sin límites geográficos.

La psicóloga clínica Chiquinquirá Blandón, experta en temas de pareja, cree que en nuestro país conseguir pareja por aplicaciones y páginas web pasó de ser algo eventual a una práctica más común, aunque aún no se iguala con otros países en Europa donde las personas parecen más abiertas a estos métodos.

“A estos medios recurren, sobre todo, personas tímidas; sin embargo, la gente cada vez se abre más a estas experiencias y claramente hay que hacerlo con su debido cuidado”, cometa la psicóloga.

Para Chiquinquirá, lo más importante de las relaciones en línea es que puedan trascender la virtualidad y se den encuentros físicos. Estos son vitales para conocer otros aspectos fundamentales en la etapa de enamoramiento.

“Aunque he tenido casos de personas que se conocieron a través de internet con alguien pero se quedó solo eso, casi que como un amor platónico”.

Sin embargo, estas relaciones parecen tener sus ventajas. Según Valeria Schapira, experta en relaciones para Match.com, está comprobado que quienes se conocen a través de este tipo de portales tienen una mayor empatía porque lo hacen a partir de coincidencias en sus perfiles. “Cuando uno conoce a una persona en la calle o en un bar, nada sabe de sus gustos, proyectos o valores. En un sitio de citas, lo que da lugar a una relación son las cosas en común”.

No obstante en apps como Tinder, decidir quién puede ser una posible cita está basado casi que únicamente en una fotografía que se pasa a la izquierda si no te interesa esa persona o a la derecha si es el caso contrario.

Valeria destaca que al conocer una pareja en línea hay posibilidades de elegir las características físicas, de personalidad, gustos, lugar de residencia, profesión, etc., de la otra persona. “Puede sonar calculador pero las principales disputas entre las personas suelen originarse en diferencias de base. Si alguien ama a los animales y se topa con quien no quiere saber nada con su perro, difícilmente pueden lograr una convivencia armónica”, señala la experta.

Y en este tema de las relaciones en línea las desventajas no se hacen esperar, un estudio de la Universidad de Michigan concluye que es más fácil llegar a una ruptura cuando una pareja se conoce a través de las nuevas tecnologías. Así es que tenga en cuenta todas las recomendaciones y no se niegue a usar estos métodos.