Pericia determinó que Juan Soto tiene altos niveles de ansiedad …

El juicio por crimen de Verónica Romero continuará el 15

La  evaluación denominada “técnica aplicada” al imputado Juan Soto el día que fue detenido como sospechoso del crimen de su exesposa Verónica Gladyz Romero surgió de acuerdo a la psicóloga Araceli González que tiene “altos niveles de ansiedad que no los puede manejar”, explicó la testigo durante el juicio oral y público que se desarrolla en la Cámara Tercera en lo Criminal de Resistencia.

El debate se reanudará el viernes 15 a las 8, se espera en la séptima jornada más testimonios y tal vez los magistrados den a conocer cuándo declarará Cristina -  hermana de la maestra asesinada Verónica Gladyz Romero (38)- que no pudo exponer en la cámara Gesell del Juzgado del Menor y la Familia por el tiempo que les llevó a  la madre Teresa Imperio Díaz y la otra hermana, Gisela.

Entre los peritos que ya pasaron los la Cámara Tercera aparece González – psicóloga de la Policía del Chaco- quien especificó que el acusado de homicidio calificado con las agravantes por el vínculo, demostró “tener ciertas dificultades a nivel emocional”.

Varios puntos fueron observados por la defensa de Juan Soto durante testimonial de una psicóloga de la policía.

La profesora en lengua trabajaba en la escuela 423 de Villa Centenario y en el Colegio Don Bosco, mientras que el presunto homicida lo hacía en una institución del barrio España.

“Las relaciones con el medio ambiente están como forzadas, como que le cuesta establecer relaciones adecuadas con las demás personas”, indicó González  sobre la entrevista que le hizo a Soto el 27 de marzo de 2013, en una oficina de Investigaciones Complejas.

También dejó en claro que “presentaba características de psicosis, era consciente de la situación que estaba pasando” y que “la capacidad de juicio se encontraba conservada”, respondió al fiscal de cámara Jorge Gómez, acompañado por su par, Héctor Valdivia.

Buscando el propio beneficio

González les dijo a los jueces lda Torresagasti, María Susana Gutiérrez y Osvaldo Verón en una de las audiencias de abril, que el profesor en educación física de 41 años, demuestra tener “mecanismo manipulatorio y narcisista”, basándose en “manejar situaciones y no dar información cuando se le solicitaba, sabiendo lo que no es conveniente para una persona o trataba de no dar información en beneficio propio y no de un tercero”.

También lo definió como “empático sin tener la capacidad de ponerse en el lugar del otro”, surgió del análisis “técnica aplicada”.

El 24 de abril cuando declaró la terapeuta, la defensa dejó entrever posible falencia sobre el protocolo empleado en la entrevista a Soto. La defensora oficial 6, Zulema Soto le consultó a González. “¿Me puede informar dónde consta esa información que le dio y el consentimiento prestado por el señor Soto?”. González contestó que “no hay consentimiento informado y firmado”.

Desde comienzo del juicio, mujeres acompañan a la familia de Verónica Romero.

Los cuestionamientos

La primera pericia efectuada en sede policial fue cuestionada por la defensa, entre los motivos Quiroga recordó que Soto llevaba más de doce horas detenido, “sin comer, sin bañarse, sin que se le hayan informado sus derechos”. Todos los puntos enumerados eran desconocidos por la psicóloga, ya que solamente se debió limitar a la entrevista del acusado.

“El nivel de ansiedad” descripto en la sala de audiencias de Juan B. Justo y avenida San Martín también fue observado por la abogada del acusado, quien preguntó si tal vez esa ansiedad no respondía al medio ambiente donde se encontraba.

Una discusión en torno a qué protocolo utilizó para la pericia psicológica se registró, arribando las partes a que González se limitó a los parámetros establecidos en la ley nacional de salud mental, acabando así todo tipo de especulación sobre si se vulneraron derechos del procesado.

González acotó ante el tribunal que fue bastante “trabajosa” la charla con el hombre nacido en Bella Vista y describió que Soto presentaba “frialdad, que vendría a ser una persona con anestesia emocional”.

Cabe recordar que la querella representada por Lorena Padován solicitó a la presidenta Torresagasti la incorporación de tres testigos más.

Por su parte, Quiroga también el 30 de abril recomendó sumar como prueba los comprobantes de pago de las cuotas alimentarias que Soto cumplió, correspondientes a julio de 2012 hasta marzo de 2013, importe destinado para las dos hijas que tenía con la mujer asesinada de once puñaladas y cuyo cuerpo apareció en su auto, en Las Heras y Seitor de la capital chaqueña.

Leave a Reply