Por Aurelio Lozano
La ropa es una extensión de nosotros mismos. Así como una tortuga tiene su caparazón, todo lo que se elige es para enfrentarse al mundo, se revela una buena parte de lo que se quiere destacar.
Según la psicóloga estadounidense Jennifer Baumgartneren, en su libro “You are what you wear: What your clothes reveal about you” (Eres lo que vistes: Lo que la ropa revela de ti), la autora examina la relación de la apariencia y el mundo interior de las personas, y como los problemas internos que llevan, inevitablemente salen a la luz a la hora de escoger qué ponerse en el día.
La forma de cómo vestir puede sugerir aspectos de la personalidad, los colores, estilos y accesorios, no tienen nada que ver con el carácter, ni muestra quiénes son como persona, sin embargo, muchos en el campo de la salud mental que se especializan en la psicología de la ropa, no están de acuerdo con esta idea; para ellos, lo que eliges llevar es para cubrir, realzar o adornar tu cuerpo y revela mucho más de lo que supones.
Sin lugar en duda es a través de la apariencia y el arreglo personal que se crean mensajes de quienes somos, cuáles son los valores, el estado de ánimo, el miedo, la autoestima, sobre todo el aspecto habla de algo muy importante, el respeto que sentimos hacia los demás; así que la ropa constituye un medio de comunicación constante, la forma de vestir habla de nosotros, transmite información. De ir la importancia de vestir de manera adecuada según las circunstancias.
También puede darnos una motivación adicional para determinadas actividades. Así, unos zapatos de correr que realmente te gusten pueden motivar a hacer deporte; la ropa conlleva una búsqueda de identidad o de diferenciación con los demás. Por ello, adquiere tanta importancia para algunos jóvenes que encuentran en ella su identidad personal y su pertenencia a un grupo.
Por lo tanto, sentirse bien repercute en todo, tanto en nosotros mismos como en nuestro alrededor. En algunos puede significar generar una energía positiva que hace un recorrido desde el interior al exterior y viceversa.
Estos son algunos consejos el lenguaje en la psicología del vestuario
1. Conoce tu figura, tanto sus puntos fuertes como los débiles, y selecciona piezas que te realcen.
2. No temas mostrar tu personalidad a través del color, el estilo y los accesorios. Sin embargo, también es importante tomar en cuenta la ocasión y el mensaje que deseas trasmitir.
3. Usa sólo aquella ropa que te hace sentir bien. Desecha la que esté cargada de acontecimientos negativos.
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