La profesora gritona, bajo la lupa psicológica

La polémica por el video de la profesora de la UNCuyo y el DAD que agredió verbalmente a sus alumnos sigue generando debate. Psicólogos y psicopedagogos especializados en educación analizaron el tema, al cual calificaron como un fenómeno multicausal.

Luego de que la noticia se viralizara por todos los medios de comunicación y cientos de voces salieran a dar su opinión acerca del tema, Alejandro Castro Santander, psicopadagogo y director del Observatorio de Convivencia Escolar de la UCA, analizó la conducta de la docente furiosa. 

"Esta actitud no es injustificable. La misma docente debe saber que no estuvo bien y debe estar arrepentida, no por lo que dijo, sino por cómo lo dijo", consideró Castro Santander. 

Expresó además que le ha sorprendido el nivel de adhesión que ha tenido la actitud de la profesora en la gente, aunque aclaró que no lo comparte ya que "un docente debe tener autoridad y debe haber una asimetría con el alumno".

"Así como le enseñamos a los chicos que las cosas no se solucionan a las piñas y sí con diálogo, ella tendría que haber tenido actitudes más pro-sociales con los alumnos", destacó Castro Santander sobre el comportamiento de la docente. 

Asimismo el especialista en en conductas y convivencia escolar explicó que este tipo de caso suceden cuando no hay un buen un clima escolar entre los profesores, los alumnos y los padres.

"Esto es un producto de un sistema que está agotado; hay mucha violencia entre las partes", dijo el psicopedagogo y advirtió que una posible solución es "crear un sistema normativo que surja de la Nación, luego de la Provincia y se refleje en las escuelas. Tiene que haber  una ley general de convivencia", destacó.  

La conducta de la profesora es producto de un sistema que está agotado.

Aunque el especialista cree que previo a cualquier medida, "la profesora debe pedir disculpas por sus actos". 

Una mirada desde la psicología

Por su parte, la psicóloga María Rosa Sfeir y representante de la Dirección de Orientación y Apoyo Interdisciplinario a las Trayectorias Escolares (Doaite) también se refirió al caso de la docente que estalló en furia en medio de una clase de secundario. 

"Es una triste situación, desde todo punto de vista: tanto para los estudiantes que estuvieron expuestos, como para la docente", dijo la especialista, quien lo vinculó además a la sociedad 2.0 al asegurar que "estas son las consecuencias hoy de las redes sociales".

Según Sfeir, "las redes tienen mucho de positivo, pero en este caso hay una doble victimización, porque aunque la que tuvo el exabrupto fue la profesora, observamos la falta de límite, de barreras".

La psicóloga María Rosa Sfeir vinculó el triste episodio con el efecto de las redes sociales.

"No ha podido mediar la reflexión. Seguramente esto que ha pasado es el resultado de una serie de hechos anteriores", destacó la psicóloga, quien consideró que el problema tiene una raíz más profunda que la clase de la profesora Laura Cogni de Bru.

"La DGE solamente ha planteado esta resolución de hacer pasar (de grado) a los alumnos; pero lo importante no es que el chico repita o no, sino que aprenda. Lo que sí pensamos nosotros es que esto es otra manifestación que se da en lo social, donde hoy no hay límites ni barreras", señaló la psicóloga, quien explicó que en la actualidad "todo está puesto afuera y no median la palabra, ni la reflexión, todo es pura acción".

En la actualidad todo está puesto afuera y no median la palabra, ni la reflexión, todo es pura acción. 

"Esto nos pasa a todos, como sociedad: en general hoy hasta se hacen chistes con la gente que se pelea, maltrata, irrumpe con intimidaciones y descalificaciones en todos lados, incluso en la televisión", ponderó.

Por ello considera que "hay un corrimiento de los roles adultos". "El adulto tiene un lugar y una función: cuidar, proteger y poner límites". 

Según Sfeir, "el corrimiento (de límites) es desde los directores con sus docentes, de los docentes con los alumnos, de los padres con los niños". 

"Tenemos padres con hijos de entre 4 y 6 años, que nos dicen que no pueden con sus hijos. Esto es un elemento que no podemos dejar de analizarlo y que evidentemente hoy se pone de manifiesto con esto que la pasa a esta docente, que evidentemente no está bien lo que ha hecho y hay que trabajar con ella", analizó la psicóloga.

En tanto la profesional, quien también forma parte del gabinete de la DGE, dijo que se ha trabajado en una serie de normativas, donde se plantea"la importancia del rol adulto y del adulto como autoridad.

"En ocasiones ha resultado positivo y en otras cuesta más que esto se lleve adelante. Nosotros como parte de la DGE estamos convencidos de proteger los derechos de los niños, niñas y adolescentes, pero también los de los docentes", destacó Sfeir sobre el trabajo de la cartera de Educación.

Además contó que tanto de la DGE como del ministerio de Educación de la Nación están realizando capacitaciones y ciclos de desarrollo profesional para docentes "para poder trabajar con las nuevas culturas juveniles, que son de hace 10 años atrás (tampoco ha pasado tanto), porque hay que tener otra forma de trabajar con ellos, de escucharlos y de plantear autoridad".

 "Hay una revictimización de todos en este caso, que no es bueno para nadie. Yo creo que hay que trabajar con esa docente para que pueda estar mejor, seguro se iniciará un proceso administrativo y sin dudas hay que trabajar con esos alumnos", cerró Sfeir.

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