Los menores de edad en México ya no podrán contraer matrimonio, ni con la autorización de sus padres, pues ahora los contrayentes deberán presentar identificación oficial que acredite su mayoría de edad.
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Lo anterior de acuerdo con la modificación al Código Civil Federal, aprobada por la Cámara de Diputados, según el paquete de modificaciones a leyes y reformas aprobadas por los diputados recientemente.

Por lo anterior psicólogos consideran viable el decreto con el cual se prohíben los matrimonios entre menores de edad, pues se afirma que con ello –quienes decidan casarse– serán más conscientes de lo que esto implica.

La licenciada en psicología Rocío Covarrubias explicó que el sistema nervioso central del ser humano científicamente termina de madurar hasta después de los 21 años de edad, y debido a ello es que se considera que a dicha edad las personas tienen la capacidad de tomar decisiones de este tipo.

“Aunque para algunos dicha medida represente que se limita el derecho de los seres humanos, considero que es positivo debido a que lo menores de edad en dicha etapa de la vida no tienen la capacidad de comprender la responsabilidad que implica el casarse”.

Afirmó que la acción –más allá de representar una limitante– es dar la posibilidad a los jóvenes de que maduren más en todos los aspectos para tomar estas decisiones, ya que debido a la inmadurez de las parejas, en el futuro se presentan problemas.

Dijo que la mayoría de las parejas que acuden a recibir terapia es debido a problemas conyugales, mismos que en la totalidad se originaron debido a que se casaron a muy temprana edad.

Manifestó que la mayoría de las parejas atendidas refieren que la razón para contraer nupcias aún sin tener la madurez emocional fue porque la mujer resultó embarazada o porque ya no querían vivir con los padres, lo que ha traído conflictos en la actualidad.

El documento, enviado al Senado de la República para su revisión y en su caso aprobación, establece que al momento de contraer matrimonio, los cónyuges asumen el compromiso de compartir un proyecto de vida en común, fundar un hogar, proveerse ayuda mutua, procurarse afecto y cuidado.

También, menciona que el escrito de solicitud para contraer matrimonio deberá ser acompañado del acta de nacimiento y una identificación oficial vigente de los contrayentes, que acredite su mayoría de edad, y que son impedimentos para dicha acción, la amenaza, la coerción y la violencia.

En los argumentos que emiten para dicha modificación se destaca que el matrimonio infantil constituye un grave problema a nivel mundial, va en contra de los derechos de los niños y las niñas que deciden por ellos, o a través de una moneda de cambio para mejorar la economía de sus papás, vivir con una pareja y cuidar a los niños teniendo sólo 16 años o menos edad.

En México, las cifras son alarmantes, pues de acuerdo a un informe de la UNICEF en el 2014 se detalla que casi un cuarto de las infantes mexicanas cumplen la mayoría de edad tras haber contraído matrimonio, tener hijos o una pareja.
En tanto a nivel estatal en el 2014 se registraron un total de 732 matrimonios entre menores de edad, sin embargo las cifras han disminuido notablemente del 2010 a la fecha.

En el 2010 se tuvieron 2 mil 053 matrimonios entre menores de edad, mientras que en el lapso al 2013 se redujeron hasta 914 y en el 2014 sólo se celebraron 732, esto nos habla de un cambio de perspectiva de las personas y de las familias en cuanto a las uniones civiles a temprana edad.