Siguen las investigaciones en torno a la psicóloga María Alejandra Lafuente Casco, quien descuartizó a su esposo y luego abandonó los restos del cadáver en varias calles de la Ciudad de México.

Ahora una nueva investigación indica que la hija de la víctima, Allan Carrera, fue quien presentó a su padre a la psicóloga.

Lafuente Casco atendía a jóvenes y adolescentes en su consultorio, y una de estas personas, era la hija de Carrera, pero dejó de asistir después de la tercera sesión cuando se enteró que su padre mantenía una relación con la psicóloga.

Según Milenio, Allan Carrera sufría de depresión y alcoholismo, y no trabajaba, porque vivía de unos negocios que tenía en el Distrito Federal, por lo que el hombre iba a consulta con Alberto Eduardo Isidro Lafuente Grimaldi, padre de la ‘psicóloga descuartizadora’.

La Fiscalía Central de Investigación para Homicidios informó que la hija de Carrera se enfrentó a Lafuente Casco por tener una relación con su padre, pero esta la amenazó de muerte.

“Comentándome (la hija de Allan Carrera) que ella (la psicóloga) la había amenazado de muerte, pero desconozco qué fue lo que exactamente le dijo”, indicó Margarita Carrera, hermana de la víctima, ante las autoridades del Ministerio Público.

Margarita Carrera también contó cuando su hermano presentó a la psicóloga a la familia.

“Nos dijo que en una semana se iban a casar e incluso, en esa ocasión ella (Lafuente Casco) comentó que al parecer estaba embarazada. La boda se celebró el lunes siguiente, pero no asistió nadie de mi familia, ya que ellos dijeron que era algo muy íntimo y solo acudieron el padre de Alejandra, la esposa del mismo y los hijos de ella”, expresó.

LA LLAMADA DEL PADRE DE LA ‘PSICÓLOGA DESCUARTIZADORA’

Cuando Allan Carrera desapareció, el padre de Lafuente Casco, el también psicólogo Alberto Eduardo Isidro Lafuente Grimaldi, llamó a los padres de la víctima para saber el paradero de su hija pues tampoco podía hallarla después de días.

El padre de la asesina volvió a llamar para informarles que su hija estaba internada en el Instituto Nacional de Psiquiatría porque la policía se la quería llevar acusada del asesinato de su esposo.

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LA MALETA ROJA

Los vigilantes de la cuadra donde vivían los esposos, ayudaron a María Alejandra Lafuente Casco a subir una “maleta roja” a su camioneta.

En esta, la psicóloga habría llevado las partes del cuerpo de Allan Carrera, para luego dejarlos en varias calles de la ciudad mexicana.

“Se veía muy nerviosa y desesperada y volteando para todos lados, se le preguntó que llevaba en la maleta y respondió que era equipo de cirujano, que era de su papá y que se lo iba a llevar a un hospital porque estaba muy enferma y la iba operar. Salió y regresó a las 4:18 de la mañana y ya no salió, pero se veía muy sospechosa”, indicó uno de los vigilantes.